Regresando

Alegrías, nostalgías y sinsabores (claro, siempre los hay, ¿cómo vivir sin ellos?). Estos tres elementos en mi vaso mezclador han dado como resultado un coctel riquísimo. Gratamente degustable tanto con el sentido del gusto, precisamente, como con el corazón.

Eso soy esta mañana, mientras recuento lo sucedido durante el viaje. Yo no sé si para alguien más que para mí esto sea relevante, pero más tarde haré una pequeña reseña del viaje y la publicaré, tal vez omitiendo nombres y algunas situaciones para no desvelar algunas cosas que a terceros pueden no convenir.

De momento, quisiera agradecer a los artífices de que este viaje haya sido la maravillosa forma de atrerrizar mi Sueño Valseado y dejarlo ser por fin algo palpable sobre la Vida y otras Cuestiones:

Gracias a Silvio Rodríguez por venir a desparramar su magia, su poesía, su amor y su rebeldía por nuestras tierras. A la Tropa Cósmica por abrir los canales y lograr hacer una comunidad tan heterogénea pero que logra comulgar perfectamente. Gracias a Claudia, la gran Mariposa de Humo no sólo por su hospedaje, sino por todo lo que da en cada abrazo, en cada mirada incluso. A Susana Castillo por su compañía, sus letras, su buen humor; sólo unas cuantas horas bastaron para darse cuenta que es una gran persona. A Skene porque es una delicia charlar con ella, por su alma (no sólo su carita) de niña angelical, por sus interesantes conceptos y por estar totalmente viva.

Nos leemos después con la bitácora de viaje de acuerdo a lo que logre rescatar de mi memoria.