Mi Último Altar

Realmente es bello mi último altar
se ve excelso sobre los parajes sombríos
además, mirándolo de lado,
tiene destellos brutalmente hermosos.
¿Qué pasará cuando lo vean los dioses?
seguramente se desatará la Primera Guerra Celestial
todos lucharlo por poseerlo
o –peor aún-, ¡deidades y demonios peleando por él!

Creo que destruiré mi último altar
aún no me decido del todo, pero tal vez lo haga
aunque se vacíen de golpe mis plegarias
y mis sueños tan estúpidamente maravillosos
Lo demoleré lentamente porque tal vez duela
lo amontaré junto a un peñasco
para que el viento arrulle su escombro
le prenderé algunas veladoras
y depositaré ahí cientos de rosas blancas
después, sobre la patena ofreceré sonrisas
entonaré unos cuantos salmos
e inmolaré mis sueños al amanecer.