Orgasmos Duales
Bueno, hace rato que no mencionaba aquí nada acerca del sexo y cosas relacionadas, ¿raro, no? Pues bien, ahora me reivindico.
Resulta que después de estos días de descanso, bien merecidos, me quedé a dormir con una amiguita, que por cierto, en cuestión de cansancio andaba en las misma que yo. Claro que ese no fue impedimento para disfrutar de unos mementos de sabrosa pasión antes de dormer.
Contario a otras veces, ahora no relato lo sucedido en esa mullida cama; lo que hoy tengo ganas de comentar es sobre la masturbación post-coito. Je je je je je, no sé si me acabo de inventar una palabrita, pero se entiende, ¿no? Después de una maravillosa cogida, ambos dormíamos plácidamente, pero me desperté en plena madrugada -¡me choca que nunca puedo dormir de un solo tirón hasta el amanecer!- El caso es que desperté con dispocisión, es decir, con ganitas… Bueno, para que se entienda, la traía bien parada. Volteé a ver a la chica que seguía dormida a pierna suelta, completamente desnuda, por una rendija de la cortina se colaba un poco de luz que le daba a su cuerpo aún más belleza de la que ya de por sí tenía, era casi imposible sustraerse a la tentación de ir sobre ella, pero recordé que estaba tan cansada y dormía tan profundamente que preferí dejarla domir.
Entonces empezó mi juego, mi mano derecha subiendo y bajando por mi pene, la izquierda acariciando mi pecho, mi cabello. Estaba gozando de lo lindo, supongo que el hecho de tener a la linda nena junto a mí me excitaba aún más, yo la veía entrecortada por la luz y la sombra del cuarto y mi mano necia se aferró de mi pene hasta hacerlo estallar… Fue una culminación diferente, muy disfrutada.
A la mañana siguiente, después de relatarle la experiencia a ella, no hubo más remedio que reiniciar el juego erótico en pareja que terminó con mi boca entre sus piernas, lamiendo una cuevita bastante húmeda y sin un solo vello, lo que me dio la idea del nuevo look que luzco ahora…
Por cierto, ¿alguna vez te masturbaste con tu pareja durmiendo a tu lado?